Las palas son utensilios básicos para realizar labores de jardinería y de huerto. Se utilizan para cavar la tierra, prepararla para plantar, arrancar raíces, excavar zanjas y otras labores.
Hay varios tipos de palas: Palas de punta redonda. Se usan para cavar. Su estructura es redondeada terminando ligeramente en punta lo que hace más fácil hincarlas en la tierra. Su borde superior es plano para poder ejercer fuerza presionando con el pie.
Palas de punta cuadrada. Su mayor superficie las hace convenientes para transportar materiales.
Palas de zapa. También tiene la punta cuadrada pero su superficie es más estrecha. Se utiliza para quitar césped o hacer bordes, entre otras labores de jardinería.
Pala de trasplantar. Similar a la anterior, se caracteriza por su estructura estrecha y punta redondeada ligeramente acabada en punta.
La evolución de la pala ha dado lugar a las máquinas excavadoras y cargadoras, muy importantes en las tareas de movimiento de tierras para remodelación y acondicionamiento de terrenos, construcción de infraestructuras urbanas, conformación de sótanos, preparación de cimentaciones de edificios, etc.