Nos encontramos ya en la temporada otoñal que marca el inicio de la recogida de setas. Para los amantes del turismo micológico ésta es una época muy esperada para disfrutar de la naturaleza y de los espectaculares paisajes, especialmente de los bosques, donde se reproducen las setas que en España son muy variadas.
El aire puro y todo el ecosistema propio de las setas son un tesoro de valor incalculable que debemos cuidar con responsabilidad. Como estamos en el bosque no hay que arrojar residuos, ni hacer fogatas.
Las setas nunca deben arrancarse, sino que deben cortarse por el tallo con una pequeña navaja o cuchillo especial para cortar setas, dejando que la parte del bulbo permanezca en la tierra.
Las navajas y cuchillos para setas vienen en diseños especiales para facilitar la tarea del buen corte y traen un cepillito para limpiarlas bien o vienen con una regla que nos ayudan a medir el tamaño adecuado.
Las setas deben recogerse en una cesta de mimbre para que las esporas caigan de nuevo al terreno y lo fecunden. Solo deben cortarse las que se van a recoger y saber diferenciar entre las setas aptas para el consumo humano y las venenosas. Nunca ingiera las que no conozca.
Debemos evitar una recogida incontrolada, insostenible y masiva para evitar el peligro de que desaparezcan. Lo mejor es consumirlas lo antes posible para saborearlas conservando todas sus propiedades.
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